Debo decir que cuando me puse a investigar sobre Meghan Markle lo hice pensando en que iba a escribir sobre la nueva figura que ocupa todos los medios y de quién todas las revistas de moda se están haciendo eco.

Pensé que iba a hacer una nota sobre moda, estilo, realeza y alguna que otra cosa superficial y divertida,  pero no es así, esta mujer es muchísimo más que una figura y no es casual que el Príncipe Harry, hijo de la rebelde Lady Di, se haya  enamorado de ella.

Meghan nació y se crió en Estados Unidos, en Los Angeles. Fue a un colegio católico y estudió, en la universidad, la carrera de Comunicación.

Hasta acá podemos decir que hablamos de  una mujer común y corriente, de clase media, pero todo cambia cuando ella, a los 11 años logró forzar a un fabricante de jabón a que corrigiera un aviso publiciario donde se dejaba entender que la mujer sólo pertenecía a la cocina. ¿Cómo lo logró? Escribió una carta a la entonces Primera Dama, Hillary Clinton y a otras figuras de alto perfil.

Así comenzó su viaje hacia una vida muy interesante y dedicada a fortalecer la lucha de la mujer por la igualdad, participando en Naciones Unidas por este tema; incluso fue ovacionada por su discurso en 2015 en el Día Internacional de la Mujer 2015 durante una audiencia de esta organización.

Además de esto, realiza un  trabajo humanitario como Embajadora Mundial de World Vision Canadá (país en el que actualmente vive), una organización sin fines de lucro que busca mejorar la educación, alimentación y atención médica de todos los niños del mundo.

Como parte de su papel, la actriz viajó a Ruanda para la campaña Agua Limpia.

Por otro lado, es una verdadera pateadora de tableros ya que, después de 7 (siete) años en pareja y un par de casada (se casó en 2011) con el director de cine Trevor Engelson decidió divorciarse y seguir con sus sueños.

En el 2014 comenzó un blog de lifestyle donde contaba sobre sus viajes, preparaba sus recetas, nos mostraba sus restaurants preferidos , sus gustos en decoración y – los posts mas leídos –  sus looks del día.

Este blog fue cerrado a mediados de este año; seguramente al saber de su próximo compromiso con el príncipe.

 

En un post en The Tig, escribió: "Nunca he querido ser una dama que asiste a almuerzos, siempre he querido ser una mujer que trabaja"

Y, como último dato de esta interesantísima mujer, te cuento que es mestiza. Ella es hija de un hombre blanco y de una mujer afroamericana.

Sobre esto dijo:

Mi herencia mixta puede haber creado una zona gris en torno a mi identidad, manteniéndome con un pie en ambos lados de la cerca, pero la he aceptado, para decir quién soy, para compartir de dónde soy, para expresar mi orgullo de ser una mujer fuerte y de raza mixta

Por todo esto, podemos decir que la realeza británica ha jugado una ficha importante en el tablero político, incorporando en su familia a una mujer que, lejos de adaptarse a los cánones conocidos de las mujeres que “acompañan” a los herederos, príncipes y reyes, establecerá sus propias reglas.

La corona, además, aceptará en su sangre a una mujer: feminista, independiente, con una carrera en las artes, capacidad de discurso y mestiza; un gran paso adelante, después de lo que todos sabemos que sufrió y padeció la Princesa Diana, entre otras.

Meghan es una combinación perfecta de frivolidad, alegría, frescura, seguridad, confianza, fuerza y carácter.

¡Bien por el reinado y muy bien por Meghan!

Créditos

  • Fotos Fuente: Google, Pinterest
  • Fuente: ABCNews
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